sábado, 29 de febrero de 2020

RUTA GORAFE
GUADIX - GRANADA
11 de febrero de 2020

BREVE COMENTARIO SOBRE LA RUTA.
Partimos desde Gorafe por la cuesta de Gog Pasamos El Alojamiento Rural de Cuesta Tranquila y llegamos a la cima. A través de la Vereda de Chirlata llegamos al vértice geodésico “El Cocón”. Allí tomamos un tentempié. Volvemos a Gorafe y cruzamos el Río Gor por encima de un tronco. Subimos por la Ruta de la Majarillas para llegar a los dólmenes 67, 68, 69, 71, 77 y 78, y volcemos a comer a Gorafe. Visitamos el Centro de Interpretación del Megalítico y los dólmenes 132, 133, 146 y 237 del poblado de Hoyas del Conquín.

IMÁGENES CAPTURADAS DURANTE EL RECORRIDO DE ESTA RUTA.
UN SIMPATICO VIDEO Y
UNA MAGNÍFICA COLECCIÓN DE AGUSTÍN, ÁNGEL Y DOROTEO

VIDEO


AGUSTÍN

ÁNGEL

DOROTEO

RECORRIDO Y PERFIL DE LA RUTA.

COMENTARIO COMPETO DE LA RUTA DE GORAFE
El comentario es una aportación de los compañeros, Paco García y los del Grupo de Flora y Fauna. Nos lo leen, durante el descanso-refrigerio que hacemos a mitad del recorrido los compañeros Paco Torroglosa el de la Ruta y Josefina el de Flora y Fauna.

Gorafe, con una extensión de 77 km. cuadrados, es una localidad y municipio situado en la parte septentrional de la comarca de Guadix. Limita con los municipios de Gor, Guadix —incluido el enclave de Bácor-Olivar—, Villanueva de las Torres, Dehesas de Guadix y Freila.
La localidad se encuentra situada en la ribera este del arroyo de Gor, en su margen derecha a 850 metros sobre el nivel del mar, junto a una zona muy escarpada formada por conglomerados. Sus alrededores se caracterizan por ser terrenos de tipo badlands, es decir, paisaje de características áridas erosionado por el agua y el viento denominado Desierto de Gorafe dedicado al cultivo de cereales en aquellas zonas más fértiles.
El actual nombre de la localidad proviene del nombre árabe de la alquería de Gaurab, nombrada con ese nombre en el siglo XII por el historiador árabe Al-Idrisi como una de las pertenecientes al término de Guadix. El topónimo Gaurab significaría «cámaras altas» o «bajo la altura» y probablemente hacía referencia a las viviendas excavadas en la roca que se encuentran aún hoy en los acantilados de la localidad.
Gorafe encierra un oasis de cultura e historia en pleno desierto. Se levanta como la huella que ni el paso del tiempo ha conseguido borrar. Una puerta al tiempo que permite que se conozcan las costumbres, hábitos y formas de vida de nuestros antepasados más remotos.
Aunque los primeros hallazgos prehistóricos descubiertos se asignan al Paleolítico Medio (ente 30.000 y 50.000 años) hace 6.000 años el valle de Gorafe estuvo ocupado por tribus caracterizadas por sus enterramientos en sepulturas colecticas, construidas con grandes bloques de piedra llamados “dólmenes”.
El origen de la palabra “dolmen” procede del bretón y significa “mesa de piedra”. Consiste en dos o más piedras clavadas verticalmente en la tierra que sostienen otra horizontal a modo de cubierta y servían como sepulturas colectivas a las Culturas Megalíticas que poblaron estas tierras.
Gorafe es el municipio que más dólmenes tiene, no solo a nivel provincial, sino europeo. Además, de entre los 242 que rodean la localidad a lo largo de sus diez necrópolis, se encuentran algunos sorprendentemente bien conservados, cuestión que resulta llamativa teniendo en cuenta que son tumbas construidas hace muchos milenios.
La posterior llegada de pobladores pertenecientes a la cultura de El Argar, 1900 a.C., y de los iberos de la Edad de Hierro (1000 a.C.) y su establecimiento en los cercanos poblados de El Culantrillo, Las Angosturas y Montealegre supuso una continuidad en la construcción de monumentos funerarios a juzgar por el ajuar encontrado en alguno de los dólmenes.
La actual población tiene su origen en la baja Edad Media con la invasión musulmana de la península ibérica. De la población almohade se conservan varios ejemplos de casas-cueva en la zona de Los Algarves.
Durante el periodo nazarí el municipio adquirió cierta relevancia al encontrarse en territorio de frontera. Aparecen en esta época las primeras referencias al castillo de la localidad, aunque es posible que éste fuera anterior. Gorafe fue conquistada en 1451 por los castellanos y su fortaleza y campos fueron entregados por los Reyes Católicos a Álvaro de Bazán y Quiñones para posteriormente ser vendidas. Gracias al eficaz sistema de riego desarrollado durante la época de dominación árabe la zona fue un importante núcleo agrícola a partir del siglo XVI.
Las primeras investigaciones de los sepulcros megalíticos fueron realizadas en 1868, siendo encontrados diversos ajuares a finales de este mismo siglo. Entre 1955 y 1959 dos investigadores realizaron el que hasta el presente es el más completo análisis sobre los sepulcros megalíticos que evidenció la existencia de los dólmenes en la zona.
Este maravilloso legado no ha sido pasado por alto por las autoridades, creándose el Parque Temático sobre el Megalítico, con su Centro de Interpretación situado en la calle Granada e integrado por tres rutas: la de Hoyas del Coquín, la del Llano de Olivares y la de Las Majadillas, que permiten visitar hasta 37 dólmenes, donde de una forma atractiva se muestran los pasajes más relevantes de la cultura megalítica y permite disfrutar de este enclave único en el mundo.
Otros lugares de interés son:
Los Algarves o casas-cueva, llamados localmente como los covarrones, son un grupo de viviendas excavadas en la piedra.
El Castillo de Gorafe, que conserva poco de lo que debió ser, es una fortificación con dos recintos rodeados de murallas y torres.
La Fortaleza de El Cuervo, situada en la margen opuesta al castillo, enfrente de la población. Está localizada en la cima de una peña y posee tres recintos de gran tamaño que según apuntan algunos investigadores podría ser el antiguo emplazamiento medieval de la localidad.
Y la iglesia de la Asunción, un templo del siglo XVI, fuertemente remodelada y actual parroquia de la localidad.
En esta zona también se encuentra el último paraíso natural de España, el Desierto de Gorafe, con cañones, barrancos, chimeneas de hadas, casas-cueva, y uno de los mejores sitios de Europa para contemplar el cielo.

FLORA Y FAUNA:
Sobrevivir al invierno en la zona de Guadix es un gran problema para animales y plantas. Las heladas llegan con el otoño y no se van hasta bien entrada la primavera. A mediados de enero, en alturas de más de 1800 metros, parece como si se entrara en Siberia, ya que se pueden superar los 20 grados bajo cero y, según la altura y la orientación, el suelo puede permanecer helado y cubierto de nieve todo el invierno.
Las hierbas pueden escapar fácilmente del frio, pasando el invierno bajo la forma de semillas o dejándose morir casi por completo manteniendo sólo brotes escondidos en el suelo. Por el contrario, a los árboles y arbustos solo les queda la opción de resistir. Y no todos son capaces.
Uno de los pocos árboles que puede sobrevivir aquí es el pino silvestre. También podemos encontrar, a más baja altura, bosques de pino carrasco, encinares, herbazal (terreno en el que crecen hierbas salvajes), bosques ribereños y arbolado disperso de coníferas (árboles pequeños en forma de cono).
Las orquídeas evocan remotas selvas tropicales o floristerías, sin embargo hay algunas especies que viven en el entorno.
Actualmente los chefs ofrecen diversas hierbas, sustituyendo o como complemento a la tradicional lechuga, y que son cultivadas en la zona, tales como los canónigos, la rúcula o las collejas.
Los semidesiertos de Los Coloraos de Gorafe están dominados por espartales y matorrales en un medio muy hostil para los árboles.
Entre la fauna existen en anfibios la rana común y el sapo corredor.
En aves, el abejaruco europeo, la abubilla, el águila real y culebrera, el aguilucho cenizo, el alcaraván común (especie de ave zancuda propia de Eurasia y África que habita lejos del agua), el alcaudón real (ave especializada en cazar insectos, reptiles y pequeños mamíferos que los empala en tallos espinosos), el avión común, el búho real, varios tipos de collalba (ave paseriforme –grupo de los cantores- que mide entre 14,5 y 16 cm. y que tienen el obispillo –zona bajo el pico- y la cola blancos), etc.
En mamíferos la cabra montesa, el conejo, el zorro, el murciélago, la rata de agua y el topillo mediterráneo son las especies más características.
Y en reptiles, la culebra bastarda, de escalera y de herradura, diversos tipos de lagartija y el lagarto ocelado.